¿Qué es la fascitis plantar?
La fascitis plantar es una inflamación o degeneración de la fascia plantar, generalmente causada por:
- Sobrecarga mecánica: Actividades que implican impactos repetitivos, como correr o saltar.
- Factores anatómicos: Pie plano, arco alto o un patrón de marcha inadecuado.
- Calzado inadecuado: Uso prolongado de zapatos sin soporte adecuado.
- Otras causas: Aumento de peso repentino o tensión muscular en la pantorrilla.
Los síntomas principales son:
- Dolor agudo en la base del talón, especialmente al levantarse por la mañana o después de periodos de descanso.
- Rigidez en la planta del pie.
- Sensación de ardor o molestia durante actividades prolongadas.
¿Cómo puede ayudar la fisioterapia?
La fisioterapia es fundamental para tratar la fascitis plantar de
forma no invasiva y efectiva. Sus beneficios incluyen:
1. Alivio del dolor
- Terapias manuales: El fisioterapeuta realiza masajes específicos para liberar tensiones en la fascia plantar y los músculos circundantes.
- Radiofrecuencia INDIBA: Ayuda a reducir la inflamación y el dolor agudo.
2. Mejora de la movilidad
- Estiramientos guiados: Se trabaja la elongación de la fascia plantar, los gemelos y el tendón de Aquiles para aliviar la tensión acumulada.
- Movilización articular: Mejora la flexibilidad de las articulaciones del pie y del tobillo.
3. Corrección de desequilibrios biomecánicos
- Fortalecimiento muscular: Ejercicios específicos para fortalecer los músculos intrínsecos del pie y mejorar la estabilidad.
- Análisis de la marcha: Identificar patrones incorrectos permite corregirlos y evitar recaídas.
Ejercicios comunes en la fisioterapia para la fascitis plantar:
- Estiramiento de la fascia plantar: Sentado, enrolla una toalla debajo de los dedos y tira suavemente hacia ti.
- Rodillo para el pie: Usa una pelota o rodillo para masajear la planta del pie.
- Elevaciones de talones: Fortalece los músculos del pie y del tobillo al levantarte y bajar sobre los dedos de los pies.
- Estiramiento de gemelos: Apoya las manos en una pared y estira la pierna afectada hacia atrás con el talón en el suelo.
Una solución eficaz y personalizada
La fisioterapia no solo alivia los síntomas de la fascitis plantar, sino que también aborda las causas subyacentes para prevenir recaídas. Con un tratamiento personalizado, que combine terapia manual, ejercicios y recomendaciones prácticas, podrás volver a tus actividades sin dolor.
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